La investigación está enfocada en el proceso participativo y de autogestión de las cooperativas de viviendas en Argentina y Uruguay.
En Argentina, haciendo particular referencia a la ciudad de Rosario, durante los años ‘80 y ’90 se gestaron cooperativas de viviendas realizadas por autoconstrucción con el apoyo técnico y financiero de ONG’s e instituciones locales. Desde el año 2000 la Ciudad de Buenos Aires tiene un programa para el financiamiento de cooperativas habitacionaless (Ley 341). Asimismo, desde el 2004 el Programa Federal de Emergencia Habitacional otorga financiación a cooperativas de trabajo que construyen viviendas económicas.
En Uruguay, las cooperativas de viviendas se desarrollaron desde los años ‘60 adoptando el trabajo de autoconstrucción por ayuda mutua. Las experiencias tienen financiamiento público y cuentan con el apoyo de los Institutos de Asistencia Técnica (IAT). Se implementaron dos fórmulas: la "Cooperativa de usuarios" (propiedad colectiva) adoptada en forma mayoritaria en el país, y la "Cooperativa de propietarios" (propiedad individual).
Nuestro trabajo propone el estudio del proceso participativo, la articulación de actores sociales y la autogestión impulsada por las cooperativas, para elaborar una lectura sobre las ventajas y dificultades de estos proyectos de hábitat social.
La metodología es de carácter cualitativa y está basada en el análisis de datos sobre la participación de los habitantes, la autogestión de las cooperativas y la organización del asesoramiento técnico de los proyectos. Se realizaron entrevistas a diversos actores sociales, complementadas con observaciones de campo.
La investigación está en curso y en algunas conclusiones indicamos la importancia de las acciones comunitarias de las cooperativas, basadas en principios participativos y de autogestión, así como el apoyo de ONG’s y organismos locales. Los resultados muestran el rol de la cooperativa como asociación que representa los intereses colectivos de los vecinos; y también posibilitaron otras iniciativas comunitarias (comedores populares, huertas, etc.) que contribuyen a la integración urbana de la vivienda de bajo costo.
Se busca poner en evidencia los aprendizajes de las experiencias de cooperativas de viviendas, considerando su potencial para la producción del hábitat social.