Los gobiernos locales, muchas veces en consonancia con las recomendaciones de organismos internacionales, particularmente organismos de crédito, o en relación con el desarrollo de nuevos enfoques en cuanto a la lectura y la intervención de y en la ciudad formulados desde centros académicos y organizaciones profesionales, proponen una serie de iniciativas respecto del desarrollo urbano que van configurando paradigmas que se afianzan y perduran de manera diferente a lo largo del tiempo. Paradigmas que contribuyen a (o terminan en) la formulación de nuevos enfoques respecto de cómo pensar el ordenamiento y la gestión del territorio municipal.
La propuesta de este proyecto es recorrer los últimos veinticinco años de continuidad de una misma administración en la gestión de la ciudad. Una misma administración que, al apropiarse de estos paradigmas (traduciéndolos, adaptándolos o simplemente incorporándolos), fueron definiendo los modos de la actuación municipal en materia de ordenamiento y gestión urbanística.
Planificación estratégica, proyecto urbano, descentralización y participación ciudadana, nuevas centralidades, articulación público – privada, desarrollo urbano sostenible, crecimiento e inclusión, son términos que fueron apareciendo en los discursos del gobierno municipal, convirtiéndose así en marco de referencia de las formas de abordar la gestión del territorio en los distintos escenarios que se fueron configurando en estos últimos veinticinco años.
El trabajo se propone analizar los resultados concretos de las políticas e instrumentos de ordenamiento y gestión del territorio que las distintas administraciones a cargo del gobierno local pusieron en práctica de acuerdo con los paradigmas adoptados y que particularizan y distinguen a una gestión de gobierno.
El trabajo supone entonces indagar en los efectos del desarrollo de esas políticas y de la aplicación de esos instrumentos, fundamentalmente en lo que se refiere a la creación de nuevo suelo urbanizado y a la recualificación o mejoras en el suelo ya urbanizado. En concreto se trabajará particularmente con las áreas dispuestas para la puesta en marcha de nuevos desarrollos (áreas de expansión urbana y áreas de reconversión urbana). Para ello, el estudio se centrará en ­los sitios seleccionados oportunamente en relación con la puesta en acción de esas políticas e instrumentos; el carácter de la transformación que hoy se registra en esos lugares de la ciudad; los efectos de esas transformaciones en la población y en el entorno urbano donde se encuentran.
Los mosaicos territoriales que se pueden reconstruir en distintos momentos de acuerdo con las políticas puestas en marcha darán cuenta de una configuración urbana con una gran heterogeneidad de espacios interiores y de los objetivos que animaron las políticas urbanas del municipio, de las convicciones en los paradigmas elegidos / adoptados y de la validez de los instrumentos utilizados en relación con las políticas implementadas